Semana 1: Antes del embarazo
Técnicamente, la primera semana de embarazo aún no tienes un bebé dentro. Es decir: no estás embarazada, pero esta semana se cuenta dentro del embarazo. ¿Confuso?
Te explicamos: Realmente no estás embarazada durante las dos primeras semanas después de tu último período, pero es a partir de allí desde donde se cuentan las 40 semanas de embarazo o los 280 días que dura. La fecha resultante es cuando probablemente se produzca el parto, aunque es normal que este pueda ocurrir entre las 37 y 41 semanas de gestación. Tu cuerpo se está preparando para poder fecundar. Tus ovarios se alistan para liberar nuevos óvulos. La ovulación se producirá alrededor del día 14. Y si hay fecundación, el primer síntoma de tu embarazo será la ausencia de la que sería tu próxima menstruación. Seguramente te diste cuenta del momento en que empezó. Puedes contar desde el momento de la fecundación a partir del día 14, contando desde el primer día de tu última menstruación (si tu ciclo es de 28 días).
Contenido de esta semana
Actividades de la semana
-
Realiza una lista de las cosas necesarias para el parto y nacimiento, tenlas lista en el armario.
-
Acude cada semana al control prenatal, no dejes de plantearle tus inquietudes al médico.
-
Realiza un plan de parto y coméntalo con tu médico.
-
Programa un día para comprar las cosas del bebé, ropa, medicamentos, biberones, pañales.
¿Qué fue lo primero que le compraste a tu bebé?
Consejos
Tener hábitos de vida saludables siempre es ideal; sobre todo si deseas tener un hijo. Asegúrate de que tu dieta contenga las cantidades adecuadas y necesarias de vitaminas, especialmente de ácido fólico, el cual te ayudará a evitar que tu bebé sufra de malformaciones del tubo neural (espina bífida).
Crema de espinacas

Ingredientes
Preparación
En media taza de consomé caliente, agregar las espinacas, tapar y dejar hervir a fuego bajo por 10 minutos. Una vez esten cocidas las espinacas licuarlas con el caldo. Reservar.
Para preparar la salsa:
Derretir la mantequilla a fuego lento y sofreir la cebolla cabezona, hasta que esté trasnparente, agregar la harina de trigo lentamente, mezclar hasta formar una pasta homogénea. Agregar poco a poco el resto de consomé y la leche, revolviendo constantemente, dejar hervir hasta que espese; agregar esta preparación a la mezcla de la espinaca, llevar al fuego bajo, agregar sal y pimienta. Una vez halla hervido retirar, servir caliente, espolvorear el queso rallado.
Notas
Esta receta aporta: calcio, potasio, magnesio y fósforo.
